viernes, 26 de noviembre de 2010

The Age of Adz, Sufjan Stevens


Vuelve el pop luminoso de Sufjan Stevens con The age of Adz, un trabajo que se aleja de la compleja instrumentación de sus discos anteriores para sumergirnos ahora en un mar de psicodelia, Glitch, folk y mucha experimentación electrónica, elementos que ha desarrollado y rebasado con absoluta maestría en este, su octavo álbum de estudio.
The age of Adz dibuja un mundo fantástico y colorido lleno de pequeñas explosiones de luz; hermosos timbres y ricas texturas en constante armonía con las letras oníricas y míticas del Multi instrumentalista. Canciones que encuentran su equivalencia en la pintura de Remedios Varo o los relatos fantásticos de Terry Gilliam. Así se siente este disco, como un viaje poblado de seres que nunca han pisado la tierra y sentimientos que florecen a cada compás del disco, como si nacieran de la misma música.
A Sufjan Stevens no hay que tomarlo a la ligera y mucho menos confundirlo con un músico ordinario, si bien es cierto que su música ha brillado como el pop más refrescante e impredecible de los últimos años esto no lo define como a un artista Indie que vive de la autocomplacencia. Todo lo contrario, Stevens ha resultado un músico prolífico y cada vez más original, desde su monumental sinfonía en Illinois hasta este álbum, The age of Adz en donde se escucha el estribillo que bien podría definir la carrera del canta autor: This is the age of Adz, eternal living.

The Age of Adz, Sufjan Stevens, Asthmatic Kitty Record ,2010.

viernes, 12 de noviembre de 2010

The Fool, de Warpaint



The Fool es el primer disco de la agrupación femenina Warpaint, una banda californiana de atmósferas lóbregas y minimalistas que se ganaría la admiración de John Frusciante luego  de que las escuchara en una serie de conciertos en Los Ángeles en 2008. El mismo Frusciante se encargó de mezclar las canciones de  su primer EP Exquisite Corpse, un atinado set de seis canciones que dieron la vuelta al mundo a través de la enorme comunidad bloguera y el YouTube. Para entonces, y en menos de un año, la banda ya daba signos de madurez, con un estilo y estética visual bien definidos: crear atmósferas oscuras y minimalistas guiadas por delgadas líneas de guitarra y la combinación de voces etéreas.
En The fool se consagran estos elementos;  intrincada y elegante, la guitarra es el hilo conductor en todas las canciones, y las voces seductoras y envolventes de estas chicas confieren a cada tema un sutil dramatismo.  Con evidentes referencias al post punk inglés setentero, en particular al trabajo de Viny Reilly, líder y guitarrista de The Durutti Column, Warpaint deja claro que no es una banda de medias tintas, estableciéndose hasta ahora como una banda imprescindible en este nuevo dream pop, una escena  a la que también pertenecen bandas como Yeaseayer, Atlas Sound, y The XX.

The Fool, Warpaint, Rough trade US, 2010.

Penny Sparkle, de Blonde Redhead


Penny Sparkle, último disco de Blonde Redhead, es la suma de otras épocas, de sus trabajos predecesores: siete discos de estudio que se han hecho con las entrañas. Esta cualidad no pasa desapercibida cuando uno visita el universo sonoro de los gemelos Pace y la japonesa Kazu Makino, discos siempre catárticos y colosales. Penny Sparkle funciona de la misma forma: la música se dispara y se eleva y alcanza niveles conmovedores en los que el oyente encuentra resonancias con alguna emoción, así como el diapasón con el instrumento musical.
Nuevos elementos mueven el ánimo del álbum hacia estados de dramatismo y sofisticación. Esto se debe en buena medida al uso constante de atmósferas electrónicas a lo largo de las canciones y a la  colaboración del productor Alan Moulder, conocido por su trabajo en el disco de culto Loveless de My Bloody Valentine.
Penny Sparkle también suena a tristeza, cada pieza es un canto acuático y humilde que hace vibrar y despertar el alma dormida. En ese sentido, esta música encuentra su símil en los discos clave del indie electrónico, como el Vespertine de Björk, en el que paradójicamente la electrónica es la piedra angular que, a través de sintetizadores y softwares de audio, construye una música orgánica y sentimental.

Penny Sparkle, Blonde Redhead, 4AD Records, 2010.

Halcyon Digest, de Deerhunter




La razón por la que Deerhunter es y seguirá siendo una banda notable es porque eligieron no olvidar. Recuerdan cada uno de los estilos y espíritus que han hecho del rock and roll  un vehículo anímico en la música contemporánea. Sin embargo, al excéntrico Bradford Cox y a su banda les llevó tres álbumes y dos eps darse cuenta de ello y sintetizar la historia de sus influencias para verterla en su nuevo disco Halcyon Digest, un trabajo luminoso que será la delicia para quienes gustan de escuchar música con alma, sonidos misteriosos que todos reconocemos pero no logramos explicar.
Da gusto escuchar discos así, en donde fluyen el ingenuo pero emocionante rock and roll de los sesenta, las delgadas y geométricas guitarras punk, la cristalina evocación del synth pop  y un  grunge de proporciones cósmicas, revestido todo de una atmósfera sutil que sabe a dream pop  y shoegaze, alma mater de la banda.
Escuchen bien, no hay pretensiones en este álbum, sólo claridad apasionada y sencilla. Así es el rock and roll de Deerhunter, una probadita terrenal de un lenguaje insondable.

Halcyon DigestDeerhunter, 4ad Records, 2010.

Special Moves, de Mogwai.




Para Mogwai hacer música es un asunto serio. Así lo han demostrado desde que se formaron en  Glasgow hace 16 años y no pocos advirtieron su potencial al tomarlos en cuenta como parte representativa del mapa musical británico, aun cuando el post rock era un género joven, y la experimentación se volvió signo inequívoco en su música. Desde entonces, Mogwai se ha consolidado como una banda de altos vuelos, de viajes inusitados.
Así, este delirante viaje los ha llevado a sacar un disco doble (cd/dvd) en vivo que compila sus mejores canciones y que captura el espíritu de la banda. Sorprende un poco que, así de increíble como suenan en vivo, no hubiesen sacado antes un disco tan dramático y épico como lo es Special Moves. La guitarra febril, la suave melancolía, la catarsis. Aquí encontramos todo lo que ha hecho de Mogwai una gran banda
“I’m Jim Morrison, I’m dead”, “Friend of the Night” y la monumental “Hunted by a Freak” abren el disco, y la música fluye con desbordante naturalidad y desata una atmósfera envolvente. Desaparecen las delgadas líneas divisorias en las canciones para concebir al disco como un todo; no hay vacíos ni titubeos, y la música toma un lugar propio como si ya hubiese existido desde tiempos remotos, esperando tan sólo ser liberada.


Mogwai, Rock Action Records, 2010.


Special Moves
(CD/DVD)